Andan nerviosos perdidos en el periódico golpista ante las próximas elecciones, sobre todo en las de la capital Iruñea. Hasta tal punto que en su ejemplar del domingo 22 de enero de 2023, es el mismo director del diario de la derechona navarrista, Miguel Ángel Riezu, quien en la Sección “El Rincón” en su artículo “la batalla electoral por Pamplona”, expresa ese estado de ansiedad que recorre a la representación en papel del corralito foral.
Están inquietos por las malas perspectivas que se vislumbran tanto para el Gobierno como para el Ayuntamiento más importante de Navarra. El objetivo que señalan para el primero es algo tan poco ambicioso como conseguir ser los comparsas del PSN, aunque, como dice el mismo Riezu, con los actuales socialistas ese empeño parece imposible.
En lo que respecta al consistorio de la capital, el propósito es desactivar como sea la alternativa Asiron. Pero Riezu, que no es tonto, aunque sea un reaccionario, es consciente del grave error que su querida derecha está cometiendo en la batalla electoral por alcanzar las ansiadas 14 concejalías de Iruñea. La ruptura de Navarra Suma y la consiguiente dispersión del voto del bloque derechista, hace peligrar que esa mayoría se pueda conseguir e impedir que Asiron vuelva a ser alcalde.
Para Riezu, un gobierno foral con Chivite como presidenta y Asiron como alcalde de Iruñea sería funesto para el futuro de Navarra. Afirmación que sólo puede realizarse desde una gran miopía y desde la ausencia total de visión crítica de lo que han supuesto para nuestra tierra los gobiernos de los caciques de UPN tanto en la Comunidad Foral como en el Ayuntamiento de la capital: ataques a nuestras condiciones de vida y trabajo, retrocesos sociales, deterioro de la sanidad y de la enseñanza pública, agresiones a colectivos populares, al euskera, corrupción generalizada, pelotazos urbanísticos, ineptitud en la gestión pública, nepotismo, y un largo etcétera.
Es tal el estado de agorafobia que tienen en el diario que publicó el bando criminal y genocida del general Mola en julio de 1936, que lo único que se le ocurre a su director es aconsejar a los diferentes candidatos de la derecha que “no entren en una lucha cainita”. De eso saben mucho en ese periódico ya que en su día apoyaron el asesinato de más de 3.500 personas en Navarra por el ejército sublevado, la Guardia Civil, los falangistas y los requetés.
Por otra parte, no hay que olvidar que los navajazos a muerte en la derecha navarra han estado presentes a lo largo de su historia más reciente; no hay más que recordar las fratricidas peleas entre Del Burgo y Aizpún, o la defenestración que desde su propio partido hicieron con el presidente Del Burgo en 1980.
A los de Esparza les aconseja que pesquen en la aguas de los descontentos del PSN, y a los del PP les pide que lo hagan en las de VOX, pues, según el propio director, Adanero tiene un buen perfil para la ultraderecha, es decir que es un facha de cuerpo entero y sobre todo de cara.
Así, con estos consejos de depredador y de comadreja que busca alimento en nidos ajenos, considera el portavoz privilegiado del facherio navarrista, que se puede conseguir la mayoría absoluta en el Ayuntamiento de Iruñea.
¡Qué malos tiempos corren para esto caciques acostumbrados a ostentar el poder sin mayores problemas! En cuanto encuentran alguna dificultad presentadas por la ciudadanía que no sigue a pie juntillas sus caprichos, entran en modo pánico y ansiedad, como la que refleja Miguel Ángel Riezu en su panfleto.